Cristiano Ronaldo mantuvo a flote al Real Madrid cuando zozobraba en la primera parte ante un gran Villarreal. El 'submarino amarillo' salió a lo grande, desplegando un exquisito fútbol, que le valió para adelantarse en el minuto 6 con una combinación entre Cazorla, Rossi y Cani, que culminó la acción. Sin embargo, un instante después, Cristiano Ronaldo llevaba el empate después de que Benzema inventase un pase entre líneas a Özil, que regaló el tanto al portugués.
El Villarreal insistió y a los 18 minutos, Marco Ruben se benefició de un despiste de Raúl Albiol para batir con una vaselina perfecta a Casillas. Debía tirar de carácter el Real Madrid y al filo del descanso Cristiano Ronaldo cabeceó una medida falta de Xabi Alonso para volver a llevar las tablas al marcador.
Tras la reanudación, la pájara del Real Madrid era historia y recuperó su habitual papel de dominador en su campo. Kaká volvió al Bernabeú tras meses de ausencia y su actuación fue decisiva. Un centro suyo desde el costado izquierdo provocó el único error de Diego. En el barullo sacó dos remates de Cristiano Ronaldo y Benzema, pero nada pudo hacer ante el tercer intento del portugués, que alcanzaba el hat-trick.
El Real Madrid vio al Villarreal contra las cuerdas y quiso matar el partido. Cristiano Ronaldo quiso devolver el regalo a su amigo Kaká, y en una contra perfecta, le asistió para cerrar el marcador. Fue cuando Mourinho enloqueció. Quiso celebrarlo con la grada, pidiendo aliento, y no vio que lo hacía en el área técnica de su rival. Un nuevo incidente en una larga lista de un técnico que respiró aliviado al final.